Después de un trimestre largo, llega el merecido
descanso
Sonríen profes, sonríen alumnos. ¡Para
reír no tomamos turnos!
Al profesor, dio una lección el alumno ducho y astuto:
todos aprendemos algo en el instituto.
Sin música en directo, no hay fiesta.
Los alumnos son angelitos en esta orquesta.
Jugamos al fútbol aunque no sea domingo.
Unos corren raudos, otros animan con
ahínco.
Hasta la profesora es buena vendedora en
el mercadito;
lo mismo vende pañuelos que guantes o zapatitos.
Panes, tortillas, ropas, recortes, fotos
en sepia…
la Navidad como un ratón famélico era en
la posguerra.
El centro se llena de colores y buenos
deseos,
y juntos nos damos calorcito en el
invierno.
Juegos reunidos: carreras de sacos, mordisco en la manzana…
Si te atreves, mete la mano en la fría palangana.
Qué buena pinta tienen las tartas.
A estas horas ya nada amarga.
Hasta la gaviota que vigila está envidiosilla;
la fiesta nos ha dado a todos vidilla.
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